Llegó el frío y ya empiezo a tener problemas con las baterías. Ayer fue mi hijo a ver los coches y cuando vino a casa me dijo que había coches que tenían la batería baja, algunos les costaba arrancar y otros no arrancaban.
Ya tengo trabajo para hoy lunes, he empezado a medir voltajes con el polímetro a las baterías y alguna estaba ya para tirar directamente.
Tengo cargadores para situaciones como esta que como hace mal tiempo los coches no andan y les flojea la batería, vamos a darles un chute de carga.
Esta directamente a la chatarra, tiene algún vaso roto, la pongo a cargar y no pasa de 11 voltios,
Mi Opel Kadett marcaba ocho voltios con el polímetro, le puse este cargador y la detectaba como una batería de 6 voltios y no cargaba, tuve que poner otro cargador y darle una carga para que este empezara a cargar como batería de 12 voltios, hay veces que lo moderno nos juegan malas pasadas.
El Renault 4L tampoco arrancaba, otro cargador y a cargar.
Ahí está la batería del 4L en el momento de la carga.-
Me gusta tener alguna batería de repuesto, puede ser que vaya a sacar algún coche y no arranque, pues con unos cables y una de estas baterías lo arranco y puedo salir, si la batería del coche estuviese rota, la sustituyo por una de estas. También hay que comprobarlas y cargarlas para que estén en condiciones, listas para su uso.
He mirado al Austin Victoria y pasado mañana cumple 50 años desde su primera matriculación, tendré que sacarlo y darle un paseo.
No es que sea una maravilla, pero a mí nunca me ha fallado. Seguiremos juntos hasta que podamos y que nos quiten lo bailado.
Estos coches me entretienen. leí hace tiempo que a los jubilados les conviene tener un perro, el perro les obliga a salir de casa y darse unos paseos. Me gustan mucho los perros pero en casa y con los problemas de movilidad que tengo no sería compatible. Es por eso que tengo los coches, de alguna manera me obligan a ir a verlos, arrancarlos, mantenerlos de las piezas fungibles, cuesta dinero, pues sí, pero qué es gratis hoy.
Los tengo y hay que mantenerlos, son coches que alguno me han regalado, otros los he comprado a precio de derribo, lo que no he hecho nunca, es vender algún coche de los que tengo, todos los que he tenido y los quité al comprar un coche nuevo, ahora me arrepiento y ojalá no los hubiese quitado.
Son como el primer amor, nunca se olvidan.
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